miércoles, 25 de diciembre de 2013

DIA 18: LA CENA DE NAVIDAD

Me molestan sobremanera los compromisos navideños, esto de tener que asistir a cenas , novenas, verme obligada a dar regalos a otros o incluso a darme mis propios regalitos, desear "feliz Navidad" a diestra y siniestra sin saber lo que realmente significa, sin que esas palabras tengan algún valor mas que el de cumplir con una cortesía colectiva. Cuando llegan las fechas navideñas me siento incomoda de solo pensar que todo esto se viene. Considero de pésimo gusto los adornos navideños, por lo menos aqui en el tropico los pinos con nieve falsa y los muñecos de Papa Noel estan tan descontextualizados que  lucen verdaderamente ridículos y estoy segura de que muy pocos son conscientes acerca de donde viene esta tradición y que lo que significa, simplemente se cumple con el código de "alegrar" la casa con los adornos convencionales. Esta mañana leía en el estado de una amiga que está en Suiza y dice que allí se colocan muchas luces porque en invierno los días son muy oscuros y de hecho estas luces se necesitan allá ...era algo que yo no sabia y ahora me explico porque tantas luces en los arboles navideños...sin embargo en el trópico hay suficiente luz, incluso demasiada, en muchas ocasiones todo el día hay un pleno sol que hiere los ojos y cuando llega la noche se encienden todos estos arboles y pesebres, lo cual resulta excesivo. Exceso también es una palabra con la cual se pueden definir las decoraciones navideñas, es como si entre mas adornos luminosos y brillantes se ponen, mas "felices" seremos en estas fiestas. En estos días he tenido gran cantidad de reacciones en contra de la celebración navideña, siendo su punto culminante mi afán por conseguir donde cenar en la Noche Buena, me vi a mi misma forzando a otras personas para que me invitaran a su cena solamente por considerar que "no se puede pasar la Noche Buena de manera simple y en casa. varias personas me preguntaron  "que vas a hacer esta noche?" y yo no tenia un plan verdadero solo una vaga invitación nunca confirmada, y en mi interior me sentía "mal" por no "tener donde pasar la navidad", como si esa fuera una condición solo para anti sociales, personas que viven en la calle o presidiarios. Para ser sincera nadie me invito a una cena navideña y no participe de las actividades navideñas de la población en la cual vivo, no me interesaron, sin embargo no deje de sentirme culpable y mal por esto, como si estuviera oyendo a mi mamá regañándome por ser tan "anti social". Y es que la gente prefiere la sonrisa hipócrita a la verdad plena, hay tantas emociones cursis adheridas a la época navideña que muchas veces siento verdadero asco de esta escena. Al final me invitaron a una cena  "por educación",  porque estaba claro que no querían en realidad invitarme, enseguida me puse a cocinar unas delicias con el fin de sorprender a los demás invitados, de nuevo mi actitud competitiva, cuando llego mi compañero y me dijo que no quería ir ....y yo me di cuenta de que yo tampoco quiera ir , y que estaba exaltando la hipocresía navideña que tanto he criticado con mi afán de participar en alguna cena de Navidad y no sentirme como un desecho social.

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